El alcohol es la sustancia psicoactiva más consumida en el mundo, y también la más aceptada socialmente. Esto hace que muchas veces detectar el principio de la adicción al alcohol sea bastante complicado. Sin embargo, existen algunas señales que pueden indicar que una persona ha desarrollado una adicción a esta sustancia.
Una de las combinaciones de drogas más habituales es cocaína y alcohol. Las personas que consumen ambas drogas lo hacen para contrarrestar los efectos negativos de una o la otra. Sin embargo, mezclar sustancias nunca es una buena idea ya que aumentan los riesgos de padecer serios problemas a nivel orgánico.
El fentanilo es un potente opioide sintético parecido a la morfina de la cuál deriva. Esta droga actúa uniéndose a los receptores opioides del cuerpo que se encuentran en las áreas del cerebro que controlan el dolor y las emociones. Tiene un potencial adictivo muy elevado y los efectos que produce en el organismo pueden ser muy graves.
Como droga psicoactiva que es, el crack es también un potente estimulante. El consumo de esta sustancia suele provocar una rápida sensación de euforia. Al tomar crack, aumenta la energía, la atención y la concentración. Sin embargo, es también una de las drogas más adictivas que existen con el peligro que esto supone.
Negar que se tiene una adicción es una actitud típica de muchos adictos. Esta conducta puede variar siendo más o menos grave, aunque en la peor de las situaciones, la negación puede llegar hasta el punto de que el enfermo siga diciendo que no es adicto a pesar de haber perdido su trabajo y su familia por culpa de la adicción
Se conoce a la sobredosis como el consumo excesivo de cualquier droga o medicamento, de manera que la sustancia llegue a alcanzar niveles tóxicos en la sangre. La forma en la que se produce una sobredosis puede venir por varios factores. La causa más común es el consumo elevado de una droga en un corto intervalo de tiempo.
Las personas que beben con frecuencia suelen consumir otras sustancias psicoactivas y también medicamentos. En el caso de los individuos que tienen un historial sanitario de depresión es habitual que lleven a cabo tratamientos que incluyen antidepresivos.
La recaída en el plano de las adicciones supone regresar a un patrón de pensamiento y comportamiento propios de la adicción que está en proceso de superación. La consecuencia es volver al consumo de la droga durante el estado anterior a la recuperación.
La mefedrona forma parte de un grupo de medicamentos que están relacionados con el grupo de las anfetaminas. Esta sustancia está considerada una droga recreativa, lo que quiere decir que su uso se ciñe únicamente a la diversión y las ganas de fiesta. A pesar de la euforia que provoca, también tiene serios riesgos para la salud.
Cuando una persona siente una fuerte necesidad o urgencia de consumir una droga decimos que tiene craving. Si el consumo no se produce, el adicto sufrirá muy intensamente tanto a nivel físico como mental. Esta sensación, que puede tener una intensidad e importancia variables, se produce normalmente cuando hay trastornos adictivos.