Alcoholismo… y otra enfermedad
Sabemos que el alcoholismo es una enfermedad que afecta a muchas personas, sobre todo en el primer mundo. Se trata de la adicción más común tanto en hombres como en mujeres y sus consecuencias abarcan muchos más ámbitos además del propio de la salud. La economía, la familia o el círculo de amistades son aspectos que pueden verse muy deteriorados por culpa de una adicción. El alcoholismo ya de por sí es una enfermedad terrible. Pero el problema todavía puede agravarse si a este trastorno se le suman otras enfermedades. Es lo que se conoce como comorbilidad y en el caso del abuso de alcohol puede estar muy relacionado.
¿Qué es la comorbilidad con el abuso al alcohol?
La comorbilidad es un término que fue descrito en 1970 por el investigador Alvan R. Feinstein. Básicamente se refiere a la presencia de uno o más trastornos, además del trastorno principal que padece una persona. En este caso, el alcoholismo es la enfermedad primaria, y la comorbilidad hace referencia a todo un seguido de otras enfermedades que pueden surgir para agravar la situación. Existen muchas comorbilidades al alcoholismo, tanto a nivel psicopatológico (trastornos mentales) como médico (enfermedades propiamente dichas).
Cuando se analiza clínicamente, se ha visto que cada vez es más difícil encontrar casos únicamente de abuso al alcohol. Esto se debe a que la mayoría de ellos ya vienen con uno o más trastornos asociados. En este sentido, es muy frecuente cuando hablamos de adicciones la aparición de la polidependencia (adicción a más de una sustancia). A esto habría que añadir todos los trastornos psicopatológicos de carácter emocional y afectivo y las enfermedades médicas.
Según el DSM-5 (Manual Diagnóstico de los Trastornos Mentales), el trastorno por alcoholismo está asociado a otros cuadros psiquiátricos. Esto significa que simplemente por el hecho de sufrir alcoholismo, existe un riesgo añadido de padecer también este tipo de trastornos (durante el inicio del trastorno adictivo o incluso con el paso del tiempo). Los síntomas más comunes relacionados con estos trastornos añadidos son:
- Dependencia y abuso a otras sustancias como, por ejemplo, sedantes, hipnóticos, cannabis, cocaína, heroína, ansiolíticos y anfetaminas.
- Ansiedad
- Esquizofrenia
- Depresión
- Problemas sociales como rupturas familiares o desarraigo laboral
- Aumento del riesgo de accidentes, episodios de violencia y suicidio
- Insomnio
- Trastornos de la personalidad (principalmente de carácter antisocial y un aumento de la probabilidad de cometer actos criminales)
Principales comorbilidades del alcoholismo
Actualmente, existen varias comorbilidades al alcoholismo. Sin embargo, algunas de ellas han sido más estudiadas que otras. Tres de las comorbilidades que mejor conocemos son el juego patológico, la sintomatología psicopatológica y los trastornos de personalidad.
- Juego patológico
Una de las comorbilidades del alcoholismo más frecuentes es la ludopatía. Y es que aproximadamente el 20% de las personas adictas al alcohol también presentan un diagnóstico asociado de juego patológico. Estudios realizados con pacientes alcohólicos mostraron que éstos presentaban síntomas que podrían indicar un posible diagnóstico de ludopatía, aunque sin llegar a cumplir criterios diagnósticos. Además, también se observó que la gravedad de los síntomas del juego patológico se relacionaban con un problema de alcoholismo más grave.
- Sintomatología psicopatológica
Un estudio realizado en 2006 investigó las comorbilidades del alcoholismo con la sintomatología psicopatológica. Los resultados mostraron cómo los principales trastornos y/o síntomas asociados al alcoholismo, a nivel psicopatológico, son de carácter ansioso-depresivo. Estos síntomas son presentes en el alcoholismo en mayor proporción que en las personas no alcohólicas. Además, es destacable que la frecuencia y la intensidad de tales síntomas se relacionan con la gravedad de la dependencia alcohólica. Como consecuencia de esto, los síntomas asociados son más graves en pacientes con un alcoholismo más severo.
- Trastornos de personalidad
Por último, otra de las comorbilidades del alcoholismo más observadas es la que hace referencia a los trastornos de personalidad (especialmente el trastorno antisocial de la personalidad). Son varios también los estudios realizados al respecto, que muestran que entre el 22% y el 64% de los casos de alcoholismo implican también ciertos tipos de trastornos de personalidad.
En CCAdicciones Asturias contamos con los mejores profesionales para ayudarte si eres adicto/a las anfetaminas o padeces cualquier otra adicción con o sin sustancia. Ponte en contacto con nosotros si crees que necesitas ayuda para volver a recuperar el control sobre tu vida.