La codependencia experimentada por una persona no adicta se expresa como un problema emocional complejo, que se caracteriza por una dependencia afectiva de la persona adicta en un grado que la hace patológica.
En la relación, la persona codependiente se siente excesivamente responsable del bienestar emocional y físico de la otra, a expensas de su propio bienestar. Este tipo de dinámica disfuncional es común en personas que están cerca de quien se enfrenta a adicciones, enfermedades crónicas, discapacidades o trastornos psicológicos.
En el caso de las adicciones, el ciclo de la codependencia se convierte en un proceso dañino que perpetúa la adicción y puede crear un ambiente emocional tóxico tanto para el adicto como para la persona codependiente. Este tipo de relaciones disfuncionales-codependientes se suelen dar en familiares, amigos o parejas que cuidan de enfermos crónicos, discapacitados, alcohólicos o drogodependientes de otras substancias o conductas.

La codependencia y su conexión con las adicciones
Normalmente, cuando nos hablan de codependencia tendemos a pensar en aquellos ejemplos que nos ha inculcado la cultura popular y que hemos visto en series o películas: amistades tóxicas, amores asfixiantes, amar es sufrir, síndrome de Estocolmo… Hay una gran diversidad de términos y expresiones que tratan de explicar aquellas relaciones interpersonales disfuncionales y dependientes. Lo cierto es que la codependencia también se relaciona con el mundo de la drogadicción.
En películas como Más allá de la vida u 8 millas vemos ejemplos de codependencia en la infancia y adolescencia ocasionados por la adicción y el alcoholismo de padres y madres, de manera que los hijos asumen el rol de cabeza de familia y se encargan y responsabilizan del hogar, renunciando a su infancia. En definitiva, el ciclo de la codependencia crea una dinámica de sufrimiento mutuo, donde la persona codependiente mantiene a la otra en su adicción, y en ese proceso se perjudica a sí misma.
¿Qué es el ciclo de la codependencia?
El ciclo de la codependencia es un proceso de interacción emocional que refuerza el comportamiento adictivo de la persona dependiente, en lugar de ayudarle a superarlo. Las personas codependientes, a menudo intentan controlar, complacer o cuidar a la persona adicta, sacrificando sus propias necesidades y deseos. En este ciclo, el amor y la dedicación hacia la otra persona se convierten en una forma de sufrimiento y autonegación. A pesar de los esfuerzos, la adicción persiste y la codependencia se refuerza, creando una trampa emocional de la que es difícil escapar. Este ciclo es un obstáculo más en el proceso de recuperación, creando una trampa emocional de la que es muy difícil salir sin la intervención de ayuda específica y especializada.
Las personas codependientes suelen tener baja autoestima y la falsa creencia de que, realizando sacrificios por la otra persona y martirizándose, obtendrán la aprobación, el afecto que necesitan e incluso el bienestar de la persona adicta. Están sometidas a elevados niveles de culpabilidad y autoexigencia, en muchas ocasiones al chantaje emocional del dependiente; y muestran signos de agotamiento crónico, estrés y depresión. El codependiente, a menudo, se encuentra atrapado en un ciclo de autodesprecio y constante preocupación por la otra persona, y es incapaz de romper el patrón.
Etapas del ciclo de la codependencia
- Negación: El ciclo comienza cuando la persona codependiente no reconoce la gravedad de la adicción de la otra persona. En esta etapa, puede minimizarse el comportamiento adictivo, se ignoran los signos evidentes de abuso de sustancias y se quiere mantener la ilusión de que todo está bajo control. Cuando el paciente sí es consciente de esta dependencia, suele justificar esta relación o trata de normalizarla.
- Responsabilidad excesiva: El codependiente asume una responsabilidad excesiva por el bienestar de la persona adicta, creyendo que su amor y apoyo pueden curar o cambiar a la persona. El codependiente deja relegadas en un segundo plano sus necesidades y deseos. Por así decirlo, se pierde a sí mismo, realizando sacrificios personales para dedicarse al completo a la otra persona.
- Rescate y justificación: Los codependientes suelen sentirse responsables de «salvar» a la persona adicta, justificando su comportamiento destructivo o interviniendo para evitar consecuencias negativas. Esto puede incluir cubrir los errores de la persona adicta, excusar su conducta o incluso mentir por ella. Este rescate refuerza la adicción, ya que evitan que lleguen a producirse consecuencias del comportamiento adictivo.
- Frustración y resentimiento: A medida que el codependiente pone más esfuerzo en cuidar de la persona adicta, puede sentir una creciente frustración, agotamiento y resentimiento. A pesar de sus esfuerzos, la adicción persiste y la persona codependiente se ve atrapada en un ciclo de sacrificio que no trae resultados positivos.
- Culpa y autosabotaje: En algunos casos, el codependiente comienza a sentirse culpable por no hacer lo suficiente o por no poder cambiar a la persona adicta. Esto genera una sensación de incapacidad, y la persona puede empezar a sabotearse a sí misma, sintiendo que no merece ser feliz o que su sacrificio es una prueba de su amor y lealtad.
- Repetición del ciclo: Como resultado de la combinación de negación, rescate y frustración, el ciclo se repite, reforzando la adicción y empeorando la situación emocional de la persona codependiente. Cuanto más se repita este ciclo, más difícil será romperlo.
¿Cómo influye en la recuperación y tratamiento?
Sin duda, la codependencia entre familiares, amigos, parejas de las personas que sufren adicción con estas actúa de forma opuesta a como se desearía. Además de generar un problema para la persona codependiente, dificulta la recuperación y el tratamiento de los adictos. Si se perpetúa el ciclo de la codependencia el paciente nunca será capaz de salir de su adicción por él mismo y por su propia fuerza de voluntad, acostumbrándose siempre a tener a otra persona que cuide de él. Los que entran en el ciclo ven imposible seguir viviendo sus vidas por sí mismos. Es esencial en la persona codependiente tomar conciencia de sus patrones de comportamiento y cambiar las dinámicas disfuncionales en las que está atrapada.
A través de la terapia individual y grupal, se enseña a la persona a establecer límites saludables, a mejorar su autoestima y a aprender a cuidar de sí misma sin sentirse culpable o responsable de las acciones de los demás. En definitiva, un buen equipo de profesionales y un tratamiento personalizado es clave para que las personas puedan sanar emocionalmente, restaurar el equilibrio en sus vidas y desarrollar relaciones más sanas y funcionales.
¿Cómo podemos romper el ciclo?
El ciclo de la codependencia, dejado a su propia inercia, no tiene fin. Pero es posible romperlo. Este proceso requiere una introspección profunda y el apoyo de profesionales capacitados que puedan guiar a la persona a través del proceso de curación. El codependiente necesita aprender a establecer límites claros y a no asumir la responsabilidad de las decisiones y el bienestar de la persona adicta. Para conseguirlo, el apoyo profesional es fundamental, ya que sus conocimientos y experiencia pueden ayudar de la mejor manera a poner fin a este ciclo. La terapia pueden ser el mecanismo fundamental para comprender las dinámicas de la codependencia e iniciar el cambio de los patrones de comportamiento.
El terapeuta ayuda al codependiente a comprender las dinámicas de la relación disfuncional y trabajar en el cambio de los patrones de comportamiento que perpetúan la adicción. También es fundamental que la persona codependiente aprenda a priorizar sus propias necesidades y a enfocarse en su propio bienestar emocional. Solo cuando la persona codependiente comienza a poner límites claros y a tomar decisiones basadas en lo que es mejor para ella misma, puede romper el ciclo de la codependencia.
Pide ayuda en Intastur
El ciclo de la codependencia es una trampa emocional que puede ser devastadora, tanto para el adicto como para la persona codependiente. Recuerda que no estás solo/a en este camino. Si sientes que la codependencia está afectando tu vida o la de alguien que amas, buscar ayuda es el primer paso hacia una vida más equilibrada y satisfactoria. En Intastur estamos contigo para alcanzar el bienestar y la felicidad tanto para las personas que sufren adicción como para sus seres queridos.