Que tipo de droga son
Los alucinógenos son un grupo diverso de drogas que alteran la percepción de la realidad, los pensamientos y los sentimientos del usuario. Bajo la influencia de los alucinógenos, las personas ven imágenes, oyen sonidos y sienten sensaciones que pueden parecer reales pero que en realidad no existen.
Muchas drogas psicodélicas se obtienen a partir de plantas y hongos, algunos se han utilizado desde hace miles de años en rituales tradicionales o religiosos. Pero este tipo de drogas también pueden ser sintéticas, es decir, fabricadas en un laboratorio.
Las personas empiezan a consumir este tipo de drogas por diversas razones, como por ejemplo vivir nuevas experiencias, divertirse, búsqueda de cierta espiritualidad e incluso por simple curiosidad.
Los efectos de los alucinógenos clásicos o naturales pueden comenzar entre 20 y 90 minutos después de tomarlos.

Efectos de tomar alucinógenos
El efecto depende sobre todo del estado de ánimo del consumidor y sus expectativas sobre el “viaje”, su capacidad para lidiar con alucinaciones y el entorno en el que consume la droga.
Una vez consumido el alucinógeno, dependiendo el tipo y de la concentración del mismo, se puede detectar, en la persona consumidora, los siguientes signos: alucinaciones visuales y auditivas, ojos enrojecidos y dilatación de las pupilas, aceleración del pulso, temblores, entre otros.
Las personas se sienten como si no fueran reales (lo que se denomina despersonalización), o como si se encontraran separadas del entorno (disociación). Experimentan cambios en los estados de ánimo (la mayoría de las veces euforia, pero a veces depresión) y su juicio se ve afectado. Los consumidores se refieren a la combinación de estos efectos como “un viaje”.
Ejemplos de alucinógenos
Los alucinógenos más conocidos o nombrados son la Dietilamida del Ácido Lisérgico, más popular como LSD procedente de un hongo, pero que consta de una parte sintética, la Fenciclidina, más conocida como PCP natural de una planta, las Anfetaminas Alucinógenas fabricada en un laboratorio, le Mescalina originaria de una planta y la Psilocibina procedente de un compuesto natural de 200 especies de hongos.
Otros tipos de alucinógenos pueden ser la N N-dimetiltriptamina, más conocida como DMT procedente de diversas plantas, o la 5-metoxi-N N-diisopropiltriptamina, más popular como 5-MeO-DIPT o Foxy fabricada en un laboratorio.
Se están sintetizando muchos compuestos nuevos, y la lista de alucinógenos va creciendo cada vez más.
Estas drogas pueden consumirse de varias maneras, como por ejemplo el LSD se puede ingerir por vía oral en forma de cápsulas, agregado a papel absorbente o de forma intravenosa. Por otro lado, la Fenciclidina, más conocida como PCP se puede consumir inhalándola, fumándola o por vía oral, más popular disuelta en alcohol o en agua, la Psilocibina y la Mescalina se toman por vía oral, en cambio la DMT se puede consumir de diversas formas, como por ejemplo la ayahuasca (vía oral), esnifar, inyectar, fumar y vaporizar.
¿Cuáles son los riesgos de tomar alucinógenos?
La severidad de las drogas psicodélicas es de difícil predicción. La cantidad consumida, la tolerancia, el uso previo, el tipo y la clase de alteraciones sensoriales que ha provocado son factores que complican enormemente determinar los riesgos exactos que puede padecer una persona al tomar una de estas sustancias. Por lo que las consecuencias de las drogas alucinógenas pueden variar.
Normalmente, su uso puede generar síndrome de abstinencia si se deja de tomar, pueden causar cambios orgánicos a nivel cerebral en relación a la serotonina, trastornos psicóticos por intoxicación, alteración de la atención de la memoria, o bien generar una alta tolerancia a la sustancia que puede implicar un aumento de la dosis tomada o la búsqueda de una droga más fuerte y potencialmente más dañina.
A nivel fisiológico pueden alterar la presión sanguínea, generar taquicardias, molestias intestinales, arritmias, insuficiencias cardiorrespiratorias y convulsiones entre muchos otros síntomas.
Las investigaciones sugieren que los alucinógenos “naturales” actúan al menos parcialmente al interrumpir en forma temporaria la comunicación entre los sistemas químicos cerebrales en todo el cerebro y la médula espinal. Algunos alucinógenos interfieren con la acción de la sustancia química cerebral serotonina, que regula:
- El estado anímico
- La percepción sensorial
- El sueño
- El hambre
- La temperatura corporal
- El comportamiento sexual
- El control muscular intestinal
Las drogas alucinógenas sintéticas interfieren con la acción de la sustancia química cerebral glutamato, que regula:
- La percepción del dolor
- Las respuestas al medio ambiente
- La emoción
- El aprendizaje y la memoria
¿Qué daños pueden causar este tipo de drogas?
Las personas que consumen alucinógenos naturales o drogas psicodélicas pueden experimentar diversos efectos secundarios a corto plazo como:
- Aumento de la presión arterial, la frecuencia respiratoria o la temperatura corporal
- Pérdida del apetito
- Sequedad de la boca
- Problemas para dormir
- Experiencias espirituales
- Sensación de relajación
- Movimientos descoordinados
- Sudoración excesiva
- Pánico
- Paranoia: desconfianza extrema e irrazonable hacia los demás
- Psicosis: pensamiento desordenado separado de la realidad
- Comportamientos extraños
- Graves perturbaciones visuales
Dichos efectos no suelen poner en peligro la vida del consumidor. Sin embargo, las drogas fabricadas o procesadas ilícitamente pueden estar contaminadas con fentanilo sin color ni olor u con otras sustancias peligrosas que pueden provocar efectos adversos graves, como la sobredosis y la muerte.
En dosis bajas y moderadas las drogas sintéticas pueden causar:
- Perdida de la sensibilidad
- Desorientación y perdida de coordinación
- Alucinaciones
- Aumento de la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la temperatura corporal
En dosis altas las drogas sintéticas pueden causar los siguientes efectos:
- Pérdida de memoria
- Pánico y ansiedad
- Convulsiones
- Síntomas psicóticos
- Amnesia
- Incapacidad de movimiento
- Altibajos en el estado anímico
- Dificultad para respirar
En cambio, a largo plazo los alucinógenos naturales pueden llegar a desarrollar los siguientes efectos:
- Psicosis persistente: una serie de problemas mentales continuos, entre ellos:
- Alteraciones visuales
- Pensamiento desorganizado
- Paranoia
- Cambios del estado de ánimo
- Trastorno de percepción persistente por alucinógenos
Se necesitan más estudios de investigación sobre los efectos a largo plazo de los alucinógenos sintéticos, pero los efectos que pueden continuar durante un año o más después de suspender el consumo incluyen:
- Problemas de habla
- Pérdida de memoria
- Pérdida de peso
- Angustia
- Depresión y pensamientos suicidas
La investigación está en curso para comprender mejor los efectos a corto y largo plazo a la salud.
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